Gracias a un sacerdote que fue ejecutado por bendecir el amor en los matrimonios.
En la Roma del Siglo III, el emperador Claudio II, le prohibió a sus soldados casarse.
Él emperador aseguraba que los hombres solteros eran más aguerridos y más valientes, y por lo tanto estaban dispuestos a dar la vida por su nación, ya que emocionalmente, al no estar casados, no tener hijos, y no tener familia, iban a estar más comprometidos en la defensa de su país, porque así podían dar sus vidas defendiéndolo, por lo que se les prohibió a todos los sacerdotes que casaran a cualquier soldado.
Sin embargo, había un sacerdote dentro del imperio romano que se llamaba Valentín, el cual, al ser muy joven, contaba con muchos amigos de su edad que habían decidido dedicarse a las armas, por lo que se acercaban a él para pedirle que los casaran en secreto, pero el padre Valentín siempre se negaba.
Tuvo que enamorarse de una chica ciega, y vivir en carne propia la separación de su amada, para poder comprender lo doloroso que era estar muy lejos de la persona a la que amas, por lo que decidió rebelarse contra las órdenes del emperador, y comenzó a casar primero, a sus amigos soldados, y después a los amigos de sus amigos, aumentando el círculo de soldados que le imploraban que por amor, los casaran.
Y así fue que, para ocultar su nombre y no ser identificado, se le comenzó a llamar El Santo del Amor, pero a pesar de ello, no pasó mucho tiempo sin que su verdadera identidad fuera conocida por el emperador, quien mandó a que lo capturaran, lo encarcelaran, para finalmente condenarlo a muerte.
Algunas referencias aseguran que San Valentín fue ejecutado por lapidación pública, y otras que fue decapitado. Pero cualquiera de los dos tipos de ejecuciones que se hayan realizado, fue llevada a cabo en la plaza principal, el 14 de Febrero del año 269.
A partir de ese día la conmemoración del Día de San Valentín, se celebró durante los siguientes 1,500 años, hasta que la Iglesia Católica, al sentir que el festejo de ese día, le restaba importancia a los matrimonios que celebraban a lo largo del año, y en otros lugares, decidió cerrar oficialmente esa fiesta.
Sin embargo, la necesidad de crear una fecha comercial para vender, ¡lo que fuera!, revivieron ese pasaje histórico, ¡y lo hicieron a lo grande!, ya que traspasó las fronteras de Roma, Europa y Asia, hasta que llegó al nuevo mundo, donde se gastan millones de pesos en regalos, para ese día, principalmente en restaurantes, flores, chocolaterías y hoteles. Justo por esto último, se creó el día previo la celebración del 14: “El Día del Condón”.
En la actualidad son muchas las iglesias católicas de Europa que reclaman la propiedad de los huesos del reconocido Patrón del Amor, ya que al ser una atracción turística les deja muchas propinas, además de que la gente aparta hasta con tres años de anticipación, las fechas para casarse en esas iglesias, porque son varias, en donde se supone que están los restos de San Valentín.
En México el auge más grande para la celebración del 14 de Febrero, comenzó a mediados de los años 60´s, y al ir perdiendo fuerza a mediados de los 70´s, ya que parecía que el amor había dejado de existir, le aumentaron la Amistad, y se comenzó a vender como “El Día del Amor y la Amistad”, retomando fuerza, ya que ahí cabía todo, para todas, todes y todos, y así se comenzaron a obsequiar flores y chocolates, sin exponer su amor, y dejarlo en una simple amistad.
Gracias a la Inteligencia Artificial hoy podemos tener una idea más clara de como fue el Sacerdote Valentín
Sin embargo, existen algunos lugares en los que no solo no se celebra este día, sino que está prohibido. En nuestra próxima entrega se los presentaremos.
Por hoy, les deseamos un
¡FELIZ DÍA DEL AMOR Y LA AMISTAD!
