CulturaEducaciónEntretenimientoHistoria LGBT+LGBTPortada

Salvador Novo: ícono cultural Gay de México

Remembranza a 50 años de su fallecimiento

En nuestra sección cultural semanal, hablaremos hoy de Salvador Novo, poeta, dramaturgo y cronista de la Ciudad de México, querido o temido por su mortífera lengua (y pluma) viperina, la cual no se quedaba callada ante nadie ni nada, así como destruía, también construía grandes personajes e historias.

Salvador Novo López nació el 30 de julio de 1904 y falleció el 13 de enero de 1974. Registrado en la Ciudad de México, durante la Revolución su familia se fue a vivir a Torreón, Coahuila. Cuando regresó, estudió en la Escuela Nacional Preparatoria, en donde conoce a otro importante personaje gay de la cultura mexicana: el poeta Xavier Villaurrutia.

Desde que se conocieron, Salvador y Xavier, vivieron una profunda amistad que cambiaría el panorama literario de México, por ende, la cultura de Latinoamérica, y del resto del mundo.

En una primera época formaron un grupo de jóvenes intelectuales al que llamaron “El grupo sin grupo”, ya que ningunos de sus integrantes quería perder su autonomía. Fundaron la Revista “Ulises”, la cual fue un absoluto éxito los dos años que la editaron: 1927 y 1928.

Posteriormente, después de un ajuste entre los escritores que conformaban aquel grupo, lanzaron de 1928 a 1931 la nueva Revista “Contemporáneos”, nombre con el que, a partir de su primer número, se conocido el grupo.

Entre los “Contemporáneos” estuvieron Jaime Torres Bodet, José Gorostiza, Carlos Pellicer, Gilberto Owen y Jorge Cuesta.

Este grupo, que ya tenía nombre, era rechazado por los otros grupos culturales nacionalistas que representaban la época posrevolucionaria, ya que los “Contemporáneos” se habían convertido en la vanguardia del arte en general, y de la literatura en particular, escribiendo y viviendo de manera cosmopolita, siendo acusados de desdeñar a México y su cultura, pretendiendo copiar a otros países extranjeros, como Francia y Estados Unidos de Norteamérica

Particularmente tuvieron un enfrentamiento permanente con Diego Rivera, quien los acusaba burgueses y afeminados.

Desde siempre Salvador Novo se decantó por la poesía, publicando en 1924 “XX Poemas”, su primer libro, después del cual publicó 19 poemarios, sobresaliendo “Nuevo Amor” de 1933 y “Seamen Rhymes” (“Rimas de Marineros”) de 1934, libro para el cual, el también poeta y dramaturgo español, Federico García Lorca, con quien tuvo un gran romance, hizo las ilustraciones para el mismo.

Una de las características más reconocidas en Novo era su visión satírica, que usaba tanto en sus entrevistas en la televisión, como en la radio y para los periódicos y revistas nacionales e internacionales.

Quizá el trabajo más recordado y reconocido del maestro Novo, fue el teatral, ya que aparte de ser un extraordinario dramaturgo, reconocido a nivel internacional, también se encargó de fundar y dirigir varios espacios teatrales, como el Teatro “Ulises” en 1928, el cual se convirtió en el primer Teatro moderno e internacional, en el cual las compañías nacionales e internacionales tenían que programar hasta con dos años de antelación un espacio para su participación.

También fundó el Teatro “La Capilla” de Coyoacán, el cual aún funciona, al igual que el Teatro “Orientación”, que funcionaba como El Teatro, en el que se presentaban todas las obras teatrales que emanaban de la Escuela de Arte Teatral de Bellas Artes, la cual formó, además del Teatro del INBA (Instituto Nacional de Bellas Artes), del cual fue el primer Director.

“La Guerra de las Gordas” y “Cuauhtémoc” fueron las obras teatrales más representadas durante los años 60s y 70s, ya que mezclaban ironía con historia mexicana y temas sociales actuales, entre los que destacaba la abierta homosexualidad de Salvador Novo, y que se complacía en restregárselo a la hipócrita sociedad mexicana, por esto su obra “El Tercer Fausto”, fue censurada en teatros que dependían del gobierno mexicano, y era representada en espacios independientes.

La pluma aguda de Novo era la más leída en el México de los años 50,s y 60’s, y trascendió internacionalmente al ser publicado también en París, semanalmente, ya que se deleitaba en relatar acontecimientos sociales, culturales y artísticos, destacando Teatro, política, comida, cine, literatura, espectáculos, viajes, en fin, la vida cotidiana en la Ciudad de México.

Fue por lo anterior que, en 1965, el entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz (Si, el que fuera suegro de Thalía, aquel que ordenó el operativo militar denominado “Operación Galeana”, que desencadenó la Masacre de estudiantes de Tlatelolco, y quien inauguró las únicas Olimpiadas que se han realizado en México) lo nombró el Cronista Oficial de la Ciudad de México. Justo en este mismo tiempo, le pusieron su nombre a la calle en la que vivía, en la Colonia Barrio Santa Catarina en la Alcaldía Coyoacán.

Era tan ácida la escritura del maestro Novo, que, a petición suya, “La Estatua de Sal”, el último libro que escribió entre 1945 y 1946, tuvo que ser publicado hasta 1998, 50 años después de su muerte, ya que, al tratarse de su autobiografía, había mucha gente aún viva de la cual hablaba cosas muy fuertes, y tanto estas personas como sus familiares podrían haber sido afectadas. Situación que ocurrió.

Salvador Novo desde siempre se presentó como un hombre homosexual muy inteligente, disruptivo, enfrentando, y confrontando, la hegemonía machista de los años 50´s, 60´s y principios de los 70´s de México, por lo que con el paso del tiempo se convirtió en un Ícono Gay, del cual se han escrito muchísimos libros y ensayos literarios.

A 50 años del fallecimiento del Maestro Salvador Novo, poeta, dramaturgo, Cronista de México, les invitamos a leer textos escritos por él y sobre él, copiando la liga y poniéndola sobre el buscador.

chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://materialdelectura.unam.mx/images/stories/pdf5/salvador-novo-55.pdf

Leave a Reply

Back to top button