Quizá este sea el último tour de la estrella en nuestro país
Una vez más, la gran estrella femenina de la música pop, Madonna, se presentó en México. Varios han sido sus shows, todos memorables a lo largo de los años. Recordémoslos:
The Girlie Show World Tour (1993): La primera vez que Madonna se presentó en México fue durante esta gira, con un concierto en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Sticky & Sweet Tour (2008): Quince años después de su primera visita, Madonna regresó a México para presentarse en el Estadio Azteca, promocionando su álbum “Hard Candy” y llenando el estadio con una audiencia masiva.
MDNA Tour (2012): Cuatro años más tarde, Madonna ofreció dos conciertos en el Foro Sol, un espacio que puede albergar a 65 mil personas, y ambas fechas fueron un éxito de ventas.
The Celebration Tour (2024): Doce años después, Madonna ha regresado a México como parte de su gira mundial “The Celebration Tour”, presentándose en el Palacio de los Deportes en la Ciudad de México con varias fechas en abril de 2024
En este último, las fechas para sus presentaciones estaban programadas para enero de 2024, pero fueron cambiadas del 20 al 26 de abril, con excepción del día 25.
La icónica Madonna deslumbró a sus fans con una serie de conciertos en la Ciudad de México, como parte de su gira mundial “The Celebration Tour”. La última presentación, fue anoche, viernes 26 de abril, cerrando con broche de oro una estancia llena de música, moda y momentos inolvidables.
The Celebration Tour es un mega montaje teatral, ya que se dividen en siete actos y canta 26 canciones, llevando al público a un viaje en la vida, los sueños y las fantasías de Madonna.
Cada noche tiene un cuatro invitada, invitade o invitado especial, tres de ellos son sus hijos.
Pero para la cuarta persona invitada, la estrella elige a alguien más, con quien califica la pasarela de Vogue a sus bailarines, habiendo tenido como jurado calificador a invitados como Ricky Martin y Wendy Guevara, cuyas presencias, han sido quizá, lo más comentado de cada concierto.
La Reina del Pop, interpretó un total de 26 canciones, destacando su gran lista de éxitos a lo largo de las décadas, en un Palacio de los Deportes abarrotado con más de 20 mil personas, quienes pagaron en taquilla desde $1,100.00 hasta $11,600.00, y en la reventa hasta $25,000.00
Una anécdota interesante es que, en 1993, Michael Jackson también se presentó en México, él en el Estadio Azteca. Esta presentación es muy recordada por haber sido el único show que Michael dio en México, y porque al final salió volando en un traje de astronauta, dándole una vuelta al escenario del Estadio Azteca.
Por problemas de dolor de muelas, Michael tuvo que ir posponiendo su última presentación varias veces, hasta que finalmente, el último de sus shows, para el que yo tenía boleto, lo dio el jueves 12 de noviembre, al cual asistió, entre el público, Madonna, y después de esperar años para verlos a ambos en un show vivo, se me juntaron en dos días seguiditos: el 12 de noviembre Michael, y el 13 de noviembre Madonna. Cosas de la vida. Y del amor.
En esta ocasión, 30 años después de aquella primera vez, la estancia de Madonna en México, que muchas personas aseguran fue la última, al menos en un show, fue un evento sin precedentes que dejó huella en el corazón de las, les y los mexicanos, posicionándola como El Ícono Mundial de la Música, sin nadie que pueda estar a su nivel.
Como seguramente dejó una profunda huella a para quienes asistieron al último show de Madonna en México, ya que tuvo de invitada a Salma Hayek, como jueza en el baile de Vogue.
He tenido la fortuna de asistir a dos de los conciertos de Madonna, uno en 1993, con mi hermana Mayra, y en 2008, como regalo de mi hermanito David Rangel, en mi cumpleaños número 50.
En ambas ocasiones la fortuna nos puso a menos de 20 y 50 metros de distancia, dejando yo hasta de respirar mientras ella hacía lo suyo.
Estoy seguro de que, antes de fallecer, en ese momento, cuando aseguran que toda tu vida pasa delante de ti, como una película, esos recuerdos serán, ¡seguramente!, de las escenas que volveré a ver, en mi película de adiós a la vida.
¡Larga vida a la Reina!
Madonna: Resiliencia en Primera Persona
Crónica de Rodolfo Vitela.
Mi experiencia en el concierto del “The Celebretion Tour” de Madonna en Ciudad de México, fue por menos
decir ¡fantástica!
Tenerla a unos centímetros, poderla ver tan cerca, significa muchas cosas; desde una consolidación económica en mi vida profesional, el ir con mi compañero de vida, y con mis hermanos, representa el cambio radical de aquel lejano concierto de 1993. Sumergido en el closet, intentado comprender mi
intersexualidad, el ataque de odio recién sufrido, con un boleto pagado por un amigo quien no pudo asistir porque tenía neumonía por el VIH, y la perdida constante de grandes amigos por el SIDA.
Las expectativas quedaron rebasadas desde un principio, el domino del escenario, el vestuario, bueno, podría decir muchas cosas, pero me enfocaré en una sola, en lo que se ha convertido mi vida en las últimas tres décadas de mi vida: la lucha por el Respeto a la Dignidad Humana.
Esta lucha que claramente comparte Madonna, y que me acerca a quien tanto admiro, el tributo que rinde a las víctimas de la pandemia del VIH/SIDA, homenajeando a su querido amigo y compañero de piso Martin Burgoyne, y su profesor de baile Christopher Flynn, teniendo como última imagen al querido Freddie Mercury, Madonna sin lugar a dudas, como muchos de nosotros, ha sufrido grandes pérdidas por esta terrible epidemia, y ella, como otras muchas estrellas luchó, y lucha, para terminar con ella.
Al ritmo de “In this life” me tuve que sentar y comencé a llorar, y tardé en reponerme, al abrazo del amor
de mi vida pude recuperarme. No sé como, Madonna puede seguir cantando y bailando, ante la fuerza de la emotividad, porque yo no pude, me congele, hoy en día mucha gente que quiero, sigue viviendo con VIH, mi cariño siempre estará con ellos, siempre.
Recordemos que en este tour Madonna apoya y recauda fondos para la población Trans, por ello la importancia de la invitación a Wendy Guevara, calificando el Vogue.
El día que fui yo, me toco como invitada en ese espacio, a la draga Pixie Aventurera, lo que representa
en estos momentos un acto de apoyo fundamental frente al odio y la cultura de los conservadores, el cual, ha enfocado sus ataques especialmente en las personas trans y dragas en todo el mundo.
Madonna en un acto de inclusión, las invita al escenario, las hace participes, las visibiliza y con ello deja nuevamente claro que ella, no se siente borrada ni amenazada por las mujeres trans, sino que demuestra que una mujer empoderada, fuerte, sin complejos de feminidades débiles, se siente cómoda entre ellas, de hecho, gran parte de su arte es transerótico.
Un momento icónico más, es cuando Madonna se pone como capa la Bandera del Orgullo, esta nueva bandera que incluye ya a la población trans e intersex, y proyecta una imagen “Los Derechos Trans son Derechos Humanos”, a modo de remembranza de aquellos comics que leíamos todos aquellos que nacimos en los 70´s, todos estos súper héroes y heroínas con las que crecimos.
Madonna también se sumerge en la realidad virtual, como parte de su legado de continuidad permanente, de evolución constante, y aunque nos regala “Don´t Cry for me Argentina” será imposible evitar el día que nos diga adiós y se aleje de los escenarios.
Por todo lo anterior, puedo afirmar que este tour, y que esta Madonna que vemos es una Madonna completamente resiliente.
